La música regional mexicana, por su rica diversidad de géneros y su gran conexión con la cultura y la identidad del país, ha adquirido un papel cada vez más destacado en el marketing global.

Desde el mariachi hasta el corrido, estos estilos musicales ofrecen a las marcas y las industrias una oportunidad única de establecer vínculos auténticos y significativos con audiencias de todo el mundo. Además, para los jóvenes músicos latinos, es un motivo de orgullo y una celebración de su identidad.

En América Latina, las reproducciones de música mexicana han aumentado más del 195% entre 2020 y 2023. En Colombia, las reproducciones de Spotify de música mexicana aumentaron un 445% en el mismo periodo y a nivel mundial crecieron 400% en los últimos cinco años.

La música mexicana conocida como norteña porque se escucha en norte del país, hoy es ya un fenómeno mundial que crece con las plataformas de streaming, especialmente Spotify. “Un x100to” de Grupo Frontera y Bad Bunny, “Ella baila sola” de Eslabón Armado y Peso Pluma y “La bebe-remix” de Yvng Lucas y Peso Pluma son las tres canciones que encabezan la lista de Spotify Top 50 Global, una muestra pequeña pero poderosa del gran momento que vive la música regional mexicana.

Más que una moda, la música regional es un movimiento

En la década de los 90, Selena Quintanilla posicionó el Tex-Mex como un género relevante en los Estados Unidos, pero su popularidad no superó la población latina en ese país, además del impacto que tuvo en México. Ahora, la música de Peso Pluma, Natanael Cano, Grupo Firme o Fuerza Régida se escucha en todo el mundo.

El dueto Ella baila sola, de Peso Pluma junto a Eslabón Armado fue la primera canción en alcanzar el top 5 en el ranking Billboard Hot 100, con más de 24 millones de reproducciones en streaming e incluso llegó al nu´mero uno en la lista Billboard 200.

La consultora Luminate señala que las reproducciones de audio on demand  de música mexicana en la primera mitad de 2024  llegaron a 13.2 millones, mientras que a nivel global, Me´xico fue el país que registró mayor crecimiento en el porcentaje total de streaming, pasando del 5.29% en 2023 a 6.03% en 2024. 

En los últimos 5 años el consumo de música mexicana a través de Spotify en México ha crecido un 604 %, mientras que en Estados Unidos un 212 % y a nivel global un 431 %. A su vez, Peso Pluma supero´ a Taylor Swift o Bad Bunny como el artista ma´s escuchado en YouTube.

Drivers generacionales del éxito de la música regional

La generación Z es una de las responsables por las cuales la mu´sica mexicana esta´ rompiendo li´mites. Según datos de Spotify, el 56% de los escuchas de artistas latinoamericanos tienen menos de 30 an~os a nivel mundial y en Me´xico esta cifra aumenta al 60% de los oyentes. El 77% de los streams de música mexicana en Spotify son Corridos.

Un elemento que explica el éxito de esta mu´sica entre los centennials es su presencia en TikTok. En 2019, Natanael Cano, Junior H y Fuerza Régida contaban con 1.6 millones de escuchas. Para 2023, esta cifra creció hasta 54.1 millones, lo que representa una tasa de crecimiento anual del 142%.

Spotify confirmó que el mes pasado, el 56% de los escuchas de artistas latinoamericanos tienen menos de 30 años. En México, la cifra aumenta a 60% de los oyentes.

¿Qué oportunidades tienen las marcas en la música regional?

Cada vez más las marcas se dan cuenta de que recurrir a la música para comunicar sus mensajes puede aumentar la memoria en el consumidor objetivo. Las audiencias globales valoran cada vez más la autenticidad y la integridad de las marcas, lo que convierte a la mu´sica regional mexicana en una herramienta poderosa para transmitir esos valores y lograr una conexión y una experiencia memorable al consumidor.

Las empresas no deberían dejar de aprovechar el poder emocional y cultural de la mu´sica regional mexicana para posicionar sus marcas de manera aute´ntica y significativa en el mercado global. Puede ser un recurso útil para muchas marcas de varias categorías, siempre y cuando sean capaces de implementar campañas con posicionamientos consistentes, algo que requiere de cierto expertise.

Las colaboraciones estratégicas con artistas, influencers y aún otras marcas que representan la esencia de la mu´sica regional mexicana, pueden amplificar el alcance y la credibilidad de las iniciativas de marketing.

Este auge también ha producido un renovado interés por los festivales de música en la región, con cada vez más y más organizadores y marcas. La combinacio´n de la creciente demanda del mercado, el potencial de nuevos mercados emergentes y una escena musical diversa hace que la organización de festivales de música en América Latina sea una jugada potencialmente estratégica y lucrativa.

Los festivales más destacados de México, como el Corona Capital y el Tecate Pa’l Norte, han mostrado un crecimiento significativo en público y alcance en los últimos años.

En particular, Tecate Pa’l Norte, que inicialmente estaba enfocado en el rock nacional, sufrió una transformación importante en 2014, incorporando artistas internacionales a su cartelera. Actualmente, es habitual ver talentos de diversas partes del mundo como parte central de su programación. Un análisis reciente de Statista señala que tres de los festivales más destacados del país lideran en términos de ingresos totales y boletos vendidos, reflejando su relevancia en la industria del entretenimiento.

La música regional mexicana es más que una moda de momento; ya es un movimiento. La música antes llamada regional, pasó a ser Internacional, para la alegría de los músicos latinos y los artistas que están dominando la escena y transformando el negocio musical.

Sin duda, posee un poder u´nico para conectar con las audiencias a nivel emocional y cultural. Las marcas que logran resaltar y celebrar la autenticidad de estos ge´neros musicales, en lugar de simplemente usarlos como una tendencia superficial, son las que logran establecer vi´nculos duraderos y significativos con los consumidores.

A pesar de los cambios radicales que se presentan en la industria musical con el advenimiento de Internet, el streaming y las nuevas tecnologías, el marketing seguirá siendo el elemento principal de intermediación de los consumos musicales. En este sentido, toma especial relevancia el know how de las agencias de medios que se especializan en conectar las obras de los artistas con las audiencias adecuadas para que tengan el impacto esperado con la inversión más adecuada.