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El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) que acompañó la investigación por la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014 anunció que dejará el caso y el país en julio próximo ante fuertes diferencias con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

De acuerdo con el periodista Pablo Ferri, del diario El País, la existencia de entre 80 y 90 documentos en que la Sedena consignó conversaciones interceptadas a supuestos responsables de la desaparición de los 43 normalistas que desde la dependencia se trataron de ocultar causaron las diferencias entre el GIEI y las autoridades mexicanas.

En el quinto informe del GIEI presentado en marzo pasado, los expertos acusaron que el Ejército escondía información relevante del caso intencionalmente.  

«El Ejército ha negado que esos documentos existan, pero el GIEI señala que hay evidencia de sobra que demuestra lo contrario. Los expertos han denunciado incluso que, en mayo de 2022, alguien al interior del Ejército concentró esta información y la movió de los archivos donde el GIEI pensaba que podría encontrarlos», explica el periodista.

Desde marzo pasado sólo quedaron dos de los cuatro integrantes originales del GIEI: Carlos Beristáin y Ángela Buitrago, quienes terminan su mandato el próximo 31 de julio; mientras que Francisco Cox y Claudia Paz y Paz se retiraron desde entonces.

Las tensiones del GIEI con la 4T

Desde agosto del año pasado, advierte Pablo Ferri, el GIEI ha tenido tensiones con el gobierno de la 4T. Fue a partir de la presentación del informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (Covaj), el cual dieron a conocer sin presentarlo antes a los familiares de las víctimas ni al propio grupo de expertos.

Luego el GIEI pidió peritajes al respecto y detectó que no había forma de verificar la veracidad o no de los mensajes usados en el informe de la oficina, coordinada por el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas.

«El fiasco del informe de la Covaj y las presiones de Gertz rompieron el equilibrio y las dinámicas de trabajo y, sobre todo, quebró la confianza entre los integrantes de los grupos», apunta Pablo Ferri.

A ello se sumaron las presiones de la Fiscalía General de la República sobre la Unidad Especial de Investigación y Litigio del caso Ayotzinapa (UEILCA) derivaron en la renuncia de su entonces titular, Omar Gómez Trejo. Esto luego de que la Unidad buscara que se giraran órdenes de aprehensión contra militares y exfuncionarios, pero luego la propia FGR solicitara detener esas peticiones,

En este contexto adverso y a casi 9 años de la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa, todo apunta a que los últimos dos integrantes del GIEI dejarán el país ante la falta de condiciones para buscar la verdad de los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014.

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